¡Buenos días desde Westport!

Los primeros días de toma de contacto han sido muuuuuuy intensos pero por fin hemos empezado la rutina. El sábado llegamos todos super cansados después del vuelo y las tres horitas de autobús pero el domingo empezamos la aventura ya a tope con la primera excursión a Achill Island.

Durante el trayecto vimos vistas preciosas e hicimos la primera parada en unos acantilados. Allí casi nos volamos de tanto viento que hacía pero conseguimos hacer la primera foto de grupo, donde como podéis ver todos salen muy guapos. Para reponer fuerzas nos repartieron unas barritas de chocolate muy ricas (ñam ñam).

Finalmente llegamos a la playa, algunos valientes decidieron bañarse acompañados de la música en directo de la gaita de un irlandés que nos acompañó.  Pudieron relajarse y comer lo que les habían preparado sus familias con unas bonitas vistas a la playa. Al final la mañana, estuvieron jugando una “pachanga” (como lo llaman ellos) contra el grupo de los franceses.

Nos fuimos de la playa para dirigirnos hasta un hotel muy bonito en el que les habían preparado un menú que ellos eligieron acompañado de las famosas chips irlandesas que no pueden faltar nunca. Mientras comían pudieron disfrutar del partido de la temporada Dublín vs Mayo y con esto dimos por finalizado nuestro primer día.

El lunes finalmente y con muchas ganas nos encontramos con nuestros compañeros que habían llegado desde Alicante, ya que el domingo se quedaron descansando porque llegaron muy tarde el día anterior.

Ya en el colegio se distribuyeron los alumnos en distintas clases, donde conocieron compañeros de otros grupos y también a su profe con la que van a compartir estas mañanas de aprendizaje. En uno de los breaks aprovechamos para celebrar el cumple de Samu con una tarta para que soplase las velas y acompañándolo del ritmo de la gaita y sus compañeros cantando.

A la salida de las clases, nos tenían organizado un tour por Westport para que nos familiarizamos un poquito con el pueblo. Nos llevaron a un take away muy conocido que disfrutamos comiéndolo en un parque aprovechando los intermitentes rayos de sol de Irlanda.

Para terminar esta pequeña excursión, hicieron su primer shopping donde visitaron algunas de las tiendas del pueblo. Algunos de ellos, muy contentos, aprovecharon para comprarse unas botas de futbol para poder machacar a los franceses en el campo del cole que tanto les gusta.

Y hasta aquí llegó nuestro día, volvimos al cole y las familias y los buses nos estaban esperando para llevarnos a las casas y reponer fuerzas para el siguiente día.

Os iremos contando más en los próximos días.

¡Un abrazo de parte de todos!