¡Os mandamos muchos saludos desde Torquay!

Sin duda elegimos el mejor momento para venir. Hemos escapado de la tremenda ola de calor que sacudía España y hemos llegado a Torquay, una ciudad fresquita y soleada (¡increíble pero cierto!) en la costa. Hay gaviotas por doquier y el puerto es precioso.

Aunque estábamos un poquillo cansados el primer día por el viaje, la emoción por conocer a nuestras familias anfitrionas, a nuestros compis y profesores y la escuela en si fue más fuerte. El clima nos ha acompañado y el sol ha brillado todos los días. ¡Hasta hemos tenido calor! El colegio tiene un césped que está fenomenal para tumbarse en los breaks, o comer en picnic al solecico. Un lujazo.

El primer día después de clase hemos ido a conocer Torquay un poquito. Hemos andado por Union Street, que es una calle que tiene un montón de tiendas y cafeterías, y conecta el colegio con el muelle. Hemos hecho un poco de turismo, hemos visto el precioso Torquay Eye (nos atreveríamos a decir que es más bonito que el de London. ¡Os adjuntamos una foto para que juzguéis vosotros mismos! Hemos disfrutado sacando fotos por el centro, conociendo los lugares más importantes (el Ayuntamiento, la Blue Fountain, la Marina, la playa…). Algunas nos sacamos algunas “fotos instagram” cerca de la costa. ¡Hasta nos dio tiempo de pasar por los recreativos y jugar algunas partidas! Después de todo, nos fuimos a tomar un helado cerca de la costa y a relajarnos un poco. Nos encantó que el sitio era muy Eco-friendly y no utilizaba plástico. ¡¡Muy bien Torquay!!

Como estábamos cansadas fuimos directas a casa después de la actividad: ¡a ducharse, cenar y al sobre! Las familias anfitrionas han sido muuuuy majas, esforzándose por que estemos fenomenal. El martes lo empezamos descansadas, con energías renovadas y a tope otra vez.

Por la tarde visitamos Cockington Village, que es un pueblito que está cerca de Torquay pero parece salido de un cuento. Las casas tienen techo de paja y todo tiene pinta de haber salido de una película de la edad media o de Juego de Tronos. Habían herreros, gente que trabajaba el vidrio y muchísima naturaleza. Vimos caballos, visitamos el jardín de rosas y algunas tiendas. Compartimos y conocimos a otros de nuestros compañeros y ¡enseñamos juegos de cartas españoles a nuestro guía inglés! Al final de la tarde, tuvimos unas “mini olimpiadas” que consistían en un montón de juegos súper chulos en la escuela. Nos lo pasamos genial.

Todas coincidimos en que pensábamos que Torquay iba a ser más pequeñito, y creemos que todo lo contrario, ¡esto promete!

Os mantendremos informados de nuestras aventuras. Mientras tanto, ¡algunas fotitos!

Saludos,

Alejandra Flores (monitora de Torquay)

Midleton School Blog