Para completar tu currículum, para poder trabajar en una gran empresa, para poder estudiar en el extranjero o, simplemente, por el mero placer de aprender. Estudiar inglés está a la orden del día en nuestra sociedad. La razón es simple: dominando esta lengua podrás acceder a cualquier reto que te propongas. Ya sea como propósito de año nuevo o como esfuerzo para el nuevo curso, lo cierto es que millones de personas cada año intentan ahondar en este idioma con diversos resultados. Lo mejor y lo más aconsejable es empezar a estudiar inglés desde pequeños. Los niños tienen una enorme capacidad para absorber los conceptos más básicos para, posteriormente, ir profundizando en ellos. De esta manera, cuando lleguen a la edad adulta, tendrán un increíble dominio de esta lengua. Eso sí, es importante que tengas claro que nunca es tarde para estudiar inglés. De hecho, cualquier persona que siente motivación para emprender el precioso camino de este aprendizaje tiene gran parte del camino andado. Eso sí, para que todo marche sobre ruedas, es fundamental que sortees ciertos errores frecuentes que podrían obstaculizar tu aprendizaje. ¡Evítalos y consigue tu objetivo sin problemas!

Guía práctica: 7 errores a evitar para no perder la ilusión al estudiar inglés

¡No te pongas excusas! En todo reto existen momentos de debilidad y obstáculos. Pero no dejes que eso te desmoralice y aprende a sacar el máximo provecho al bonito proceso de estudiar inglés.

1. La falta de constancia, un problema con fácil solución

Quedar con los amigos, ir al cine, ir a tomar unas cañas o ver el partido de tu equipo son planes que quizá te resulten más atractivos que sentarte a estudiar inglés en tu tiempo libre. Por eso, es frecuente que, pasadas unas semanas, tu impulso inicial de aprender idiomas quede relegado ante estos planes lúdicos. Para ello, no te agobies: seguro que encuentras un momento en la semana para poder dedicar a esta tarea. No te lo tomes como una carga, sino como una oportunidad para abrirte las puertas a un futuro lleno de éxitos. Y, sobre esos planes que tanto te gustan, ¿qué tal si te los tomas como una buena recompensa después del trabajo bien hecho?

2. Un enfoque personalizado, la clave del éxito

Cada persona es un mundo y es fundamental saber de qué manera puedes sacar lo mejor de ti a la hora de estudiar inglés. Asegúrate de elegir una metodología que se adapte a tus necesidades y a tus expectativas. Además, hoy en día es muy sencillo encontrar diferentes recursos (vídeos, canciones, divertidos tests…) con los que la labor se te hará más amena. Verás como de esta sencilla manera te sentirás más a gusto y aprenderás mejor y más rápido. ¡Todo ventajas!

3. El punto de partida determina tu progreso

A la hora de iniciar las lecciones has de saber exactamente en qué punto te encuentras. Si quieres abarcar un nivel superior al que conoces, te agobiarás y tirarás la toalla. Por el contrario, si comienzas con lecciones muy sencillas para ti, seguramente te aburras y pierdas la ilusión. ¡Asegúrate de escoger el punto medio que te garantice el éxito!

4. Ser autodidacta, ¿un riesgo o una ventaja?

Mucha gente cree que comprando unos cuantos libros puede estudiar inglés por su cuenta. Pero, cuidado: la ausencia de un docente que pueda solventarte dudas es una enorme complicación. Además, las lecciones autodidactas suelen ser bastante aburridas, al contrario que en las clases de una academia de inglés impartidas por un profesional preparado. Por último, hay ciertas habilidades, especialmente de la comunicación oral, que requieren un interlocutor. ¡Tenlo en cuenta y valora qué es lo que más te compensa!

5. No por mucho madrugar amanece más temprano

Quizá te hayas propuesto obtener un título oficial de Cambridge o Trinity en cosa de tres meses. Es genial que tengas tantas ganas, pero, depende de tu nivel inicial, quizá el plan sea demasiado ambicioso. No es conveniente que te des una paliza ni que conviertas estudiar inglés en un suplicio. Márcate un ritmo fijo y síguelo sin presión. Aunque tardes un poco más de tiempo, irás mucho más seguro y, sobre todo, aprenderás de una manera eficaz.

6. El peligro de verse obligado a dejar pasar una buena oportunidad

Ponte en situación: te llaman para una formidable oportunidad laboral, pero no dispones del nivel de inglés exigido. ¿Te gustaría dejar pasar ese tren? Seguro que no. Por suerte, con unos meses de dedicación, nunca más volverás a tener ese problema. ¡A partir de ahora tendrás un currículum más completo y competitivo!

7. Pasar vergüenza es humano, superarla es una obligación

¿Temes hacer el ridículo al hablar en inglés? ¿El mero hecho de tener que comunicarte en ese idioma te pone en tensión? A caminar se aprende hablando. Nadie se va a reír de ti por tener ganas de aprender y de mejorar tus habilidades lingüísticas. Lánzate a la piscina y sorpréndete a ti mismo al ver tus avances al expresarte. ¡No hay mayor triunfo que la satisfacción personal!

¡Manos a la obra! Pon en práctica estos consejos y aprende inglés con una sonrisa

Ahora que conoces los puntos débiles de cualquier estudiante y sabes cómo remediarlos, es hora de que des el gran paso. En Midleton School te lo ponemos fácil: nuestra academia de inglés en Getafe te ofrece todo tipo de cursos de grupo reducido para todas las edades. Y, si tienes un innegable espíritu aventurero, anímate a realizar alguno de nuestros cursos de inglés en el extranjero o un Año Académico en Irlanda, con la que disfrutarás de una maravillosa inmersión lingüística. Estudiar inglés se convierte en tu afición preferida con Midleton School. ¡Te esperamos!

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