¡Hola de nuevo desde Dublín!

Otra semana más, aquí os contamos nuestras novedades:

El miércoles fuimos al Jumpzone, pudimos saltar de una a otra colchoneta sin parar; además, de desafiarnos entre nosotros para ver quién llegaba el primero en la carrera de obstáculos o ver quién aguantaba más sin que le golpeara el palo giratorio. La verdad es que nos gustó un montón y descargamos toda nuestra energía acumulada.

El jueves hicimos un Treasure Hunt en St Stephen ‘s Park. Al principio nos costó un poco orientarnos pero una vez nos ubicamos, supimos pasar todas las pruebas mientras exploramos cada rincón del inmenso parque. Por la tarde repetimos la disco junior donde bailamos y cantamos nuevas canciones internacionales que hemos descubierto durante nuestro viaje.

El viernes tuvimos cambio de planes y como nos hizo un tiempo muy irlandés, estuvimos aprendiendo diferentes juegos típicos de aquí. Asimismo, volvimos a recordar y entonar esas maravillosas canciones
irlandesas que nos hablaban de toda la historia pasada de Dublín; comenzamos con juegos para entrar en calor y quitarnos la timidez. También, aprovechamos las últimas horas del día e hicimos varias manualidades.

Por la tarde tuvimos un encuentro para despedirnos de los compañeros y compañeras que se iban el sábado, hubo sonrisas, lágrimas y sobre todo muchos abrazos, las monitoras insistimos en que no se lo tomaran como un «para siempre», sino un «hasta pronto», ya que a partir de entonces todos y todas iban a estar en contacto, y cualquier excusa es buena para retomar contacto con las nuevas amistades que han ido surgiendo en este viaje.

El sábado fuimos a Glendalough. Nada más llegar pasamos por un cementerio antiguo y una catedral medio destruida. Allí aprendimos sobre la historia de esta ciudad a través de sus ruinas. Acto seguido caminamos por una ruta hasta que llegamos a una extensa llanura al lado del lago. Nos acercamos a la orilla para contemplar el precioso paisaje verde y comprobamos lo fría que estaba el agua (ninguna se animó a darse un chapuzón). Aprovechamos para comer unos perritos y unas patatas fritas en unos puestos al lado mientras disfrutamos de las vistas. Finalmente, recorrimos otro camino de vuelta al autobús donde comentamos lo mucho que disfrutamos ese día.

Nuestro último domingo lo pasamos en uno de los centros comerciales más grandes de Europa, el centro comercial de Dundrum. Después, volvimos al centro de Dublín. Pasamos un día fantástico: terminamos de hacer nuestras últimas compras y dimos nuestro último paseo por el destino que se ha convertido en nuestro hogar estas tres semanas pasadas.

El lunes de nuestra última semana fue un día tranquilo. Tras una mañana dando clase y aprendiendo distintos pasos de bailes típicos irlandeses, pusimos rumbo por la tarde a Dublinia, un museo vikingo. Nos adentramos en las habitaciones ambientadas como en un poblado vikingo ¡y nos sentimos como esos guerreros y escuderos volviendo a casa tras un viaje en barco! Nos explicaron las costumbres y tradiciones vikingas y conocimos la historia de cómo se fundó la ciudad de Dublín a partir de un asentamiento.

El martes fuimos al National Gallery, un museo de arte en el cual vimos cuadros de diversos artistas famosos tales como: Caravaggio, Rembrandt, Monet, Velázquez, Picasso, Goya y Van Gogh. Estuvimos intentando representar los cuadros a nuestra manera ¡y la verdad que muchos de ellos los hicimos clavaditos!

El miércoles visitamos el Jeanie Johnson, una réplica de un antiguo barco del siglo XIX que utilizaban los inmigrantes para escapar de la gran hambruna irlandesa. Pudimos subirnos a bordo de este maravilloso barco y nos hicieron un tour en el que nos enseñaron las diferentes zonas del mismo.

Va a ser una semana muy triste, pues tendremos que despedirnos de nuestras nuevas amistades y nuestra familia anfitriona. Podemos decir que ha sido una gran experiencia y nos llevamos muchos recuerdos con nosotros de vuelta. ¡Una aventura que no olvidaremos nunca!

Saludos y abrazos de parte de todos los chicos y chicas a sus familias españolas. Ya no queda nada para volver a la rutina familiar y como no, seguir disfrutando de las vacaciones que nos quedan.

Bye Bye!!

Natalia Tajuelo y Claudia Diaz,
Dublín familiar group leaders.